Datos provenientes de otras regiones, como Rosario, alertan a la situación de toda la provincia. Desde esa localidad confirmaron que, si la situación continúa complejizándose, deberán optar por brindarle oxígeno a uno u otro paciente. En diálogo con Buen Santa Fe, Jorge Prieto, Secretario de Salud, apeló a la conciencia social para que esta situación no tenga que concretarse.
"La situación sigue siendo delicada. Tiene que ver fundamentalmente con el número de personas que ingresan de forma explosiva y rápida a los servicios de cuidados intensivos. El Gobierno Provincial ha hecho esfuerzos en adquirir camas y respiradores, pero el recurso humano sigue siendo la herramienta principal para asistir y mantener estos sistemas. En este momento tenemos camas disponibles. Los efectores realizan un trabajo artesanal para rotar a los pacientes: todos los pacientes que han requerido asistencia, la han tenido", comenzó diciendo Prieto.
Además, señaló que "es compleja la situación: se valora cuando nos toca de cerca. Cuando uno habla de limitación de circulación, es algo fundamental a tener en cuenta que, si disminuimos la propagación, enlentecemos. Los pacientes requieren una larga estadía: están por debajo de los 60 años. Hoy, que contamos con la vacunación, cortar la circulación es lo único que nos lleva adelante. Por eso pedimos cooperación y solidaridad. Las grandes ciudades son receptoras: les pedimos a las pequeñas localidades que se cuiden, que van a llegar vacunas. Es la primera bandera: la prevención".
Con respecto a la vacunación, Prieto explicó que "se comenzó con la segunda dosis de Sinopharm, que es una de las que más recibimos. Y se está esperando a que empiecen a llegar las segundas dosis a mediados o fines de mayo. Tenemos que tener tranquilidad en el impacto que tiene. La primera vacuna el organismo hace un reconocimiento y la segunda dosis es hiperactividad. Es importante que se queden tranquilos: todo el programa de vacunación va a ser administrado por dos dosis. Depende de las llegadas de vacunas. Se estima que aproximadamente van a estar en tiempo y forma este segundo componente de Sputnik y las demás van a ser reemplazadas por alguna otra marca de vacunas del mismo componente. Va a haber un gran porcentaje de vacunación: casi un millón de personas en lo que es la población objetivo".
También, marcó diferencias con la primera ola de coronavirus. "Lo que varía con lo que fue la ola del año pasado es la contagiosidad que tiene esta variante: 70 veces más que el resto. Contagia prácticamente con personas asintomáticas. Hay disminuciones de casi un 28% en Buenos Aires y un 11% en Santa Fe. Tenemos una amesetamiento alto pero lo que tenemos que ver es que esta patología es muy tórpida: que se encienden rápido. Personas internadas en sala general, a las 48 horas tienen que ser derivadas a terapia intensiva. Eso nos tiene que hacer más reflexivos. No nos queda más que cuidarnos, fundamentalmente en una estación que no nos va a permitir trabajar y estar ventilados. Pedimos esta ventilación cuidada y trabajar abrigados".
"Estamos viendo que las camas generales no son la consecuencia, si no los servicios críticos: dentro de ellos, lo fundamental tiene que ver con el recurso humano. No se trata de sumar camas, tenemos que cortar el número de casos que ingresan porque no los podemos contener en servicios generales. Pedimos la solidaridad de las localidades vecinas, porque somos las localidades receptoras con mayor capacidad de resolver. Si continuamos con esta contagiosidad, y si bien tenemos amesetamiento, no vamos a poder dar abasto. El recurso lo delimitan los brazos, las piernas, que son lo que necesitamos para controlar un paciente y eso no lo podemos comprar ni expandir", añadió Prieto.
En este sentido, destacó la capacidad de atención del sistema de salud. "No hemos tenido derivaciones. Tuvimos una situación compleja que tiene que ver con la estabilidad de los pacientes. Muchas veces, uno pide una cama y la estabilidad del paciente no permite el traslado. No tenemos negativas de camas: ningún paciente ha quedado arriba de una ambulancia sin ser asistido y eso se tiene que valorar".
"Hoy no hemos tenido que tomar la decisión de si un paciente sí o no: no tenemos que llegar a eso. Lo reflexivo en esto no son las restricciones ni la flexibilidad. Lo que tenemos que restringir es la circulación: si no hay circulación, la propagación disminuye. Les pedimos un esfuerzo más. Si no hay prevención, cuidado, solidaridad, no vamos a poder enfrentar este enemigo mundial. Queda poco tiempo: quizá en 4 o 5 meses tengamos la población vacunada en un 60%", cerró Prieto.
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