Con argumentos más que razonables, el Gobierno Nacional suspendió el feriado puente del 24 y 25 de mayo para evitar la movilización de personas en una etapa ardua de la pandemia de coronavirus. Desde la Cámara de Cabañeros y Servicios Turísticos de la Provincia de Santa Fe comprenden la decisión, aunque no dejan de remarcar que repercute negativamente en el sector.
En diálogo con Telefe Santa Fe, Guillermo Kees, que integra el organismo, describió el momento que atraviesan. "Es muy difícil. Entendemos las medidas que emanan del Gobierno aunque a veces consideramos que son atemporales. El año pasado cerrados demasiado temprano, estuvimos 9 meses inmovilizados. Ahora, la segunda ola es terrible, pero queremos que la comunidad sepa que somos familias emprendedoras: estamos abiertos, pero la gente tiene miedo y entendió el mensaje del Gobierno de no trasladarse. Eso nos pega mucho".
Por otro lado, se refirió a la suspensión del feriado puente del 24 y 25 de mayo. "Tiene una lógica porque se prioriza la salud. Por supuesto que el sector desea un feriado largo porque nos perimite cubrir datos operativos. Pero esto nos aniquiló: teníamos muy pocas reservas y automáticamente se cayeron las que estaban. Le decimos que a la gente que, si no puede hacer el feriado largo, puede hacer el fin de semana común. Estamos abiertos, operativos y protocolizados".
Además, recordó que "hoy estamos abiertos, el Gobierno nos autoriza a trabajar. Entendemos que hay que cuidar la salud, pero queremos que el Gobierno nos atienda en esta circunstancia y nos convoque a una mesa donde digan que nos van a contemplar en asistencia económica como a otros sectores".
También, graficó cómo impactó el cierre del sector durante el 2020. "Imagínense cualquier dueño de propiedad que deja de atenderla: se cae a pedazos y tenés que retomar todo. Cualquier insumo es caro, no es fácil acceder. Estar sin actividad significó endeudarnos para poder quedar bien".
En este sentido, señaló que "la ayuda no llegó a tiempo y no les alcanzó a todos: mucha gente quedó afuera. No queremos que pase eso porque estamos seguros de que esto viene para largo: creemos que nos va a agarrar de nuevo cerca de Navidad gritando, poniendo la voz en el cielo, queremos trabajar".
En cuanto a los efectos, contó que en el sector "se perdieron puestos de trabajo, se vendieron complejos. No es fácil desprenderte de una persona y empezar de nuevo. La idea es mantener puestos de trabajo y las puertas abiertas. Estamos convencidos de que podemos atender a la gente en el marco de la pandemia: demostramos que no generamos ningún contagio mientras estuvo la temporada de verano".
"Le pedimos a Alejandro Grandinetti que atienda la situación: nos prometió que se iba a poner en contacto con el Ministro de la Producción, con el Gobernador, y que nos iba a dar soluciones para asistirnos con créditos. La idea es que nos atiendan y que los impuestos se puedan reprogramar los vencimientos", cerró Kees.
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