"A la gente no la puedo criticar, porque hubo mucha que se quedó a festejar en su casa", dijo el director del Cullen quien aseguró que nadie puede controlar la marea humana que se desató este fin de semana en la ciudad.
Según Poletti es mucho peor no haber pensado lo que podía suceder si en la ciudad se festejaba un campeonato que no se había obtenido nunca por los clubes. "Lo que nos puede venir en los próximos 14 días amarga y entristece al personal de salud", expresó el funcionario.
Criticó duramente a la Asociación del Fútbol Argentino ya los dirigentes a quienes les endilgó la falta de capacidad para manejar este deporte en un contexto de pandemia.
"Se sigue jugando y nos basamos en un análisis negativo que sabemos que no sirve", expresó visiblemente indignado Poletti. Un Presidente y sus ministros se aislan y el fútbol sigue como si nada pasara, prosiguió el director del Cullen, quien aseguró no entender los protocolos que maneja el fútbol.
"Ojalá no haya contagios masivos" y contó que en caso de que suceda el Hospital no podría dar respuestas luego de lo que pasó en la ciudad en las últimas 72 horas.
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